El ano

El largo manto de "Bob" cubre todo su cuerpo incluido el ano. Si el pelo de esta zona está largo puede que se le peguen restos de heces, hasta el punto de poder formar un tapón que provoque una patología conocida como "falso estreñimiento" que impide que defeque con normalidad.

Hablar de caca puede darnos asco, pero debemos hacer de tripas corazón, pensar que sólo es caquita maloliente y a la faena.

Así como debemos recoger las heces de "Bob" (que además de ser un acto cívico nos permite examinar su estado de salud), debemos revisar a diario su ano y limpiarlo. Sí, sí, limpiarlo y retirar los restos de heces. Un truco, echamos polvos de talco en el culete, lo dejamos secar un rato y con un peine de púas apretadas los retiramos junto con los restos de heces. Si después limpiamos la zona con una toallita húmeda de bebé "Bob" quedará en la gloria.

Para evitar que se manche con las heces debemos recortar el pelo que rodea el ano, no  raparlo al cero pues "Bob" puede parecer un mandril, pero sí recortarlo muy corto. Particularmente lo recortamos más o menos a medio centímetro de largo y con forma de triángulo con la punta hacia abajo, rodeando el ano.

Concluimos pues esperando que a partir de ahora con vuestro "trabajo sucio" Bob estará mucho más limpio y se mantendrá mucho más sano.